El yacimiento de La Carisa fija el nacimiento de la frontera asturiana a finales del siglo VII

Los expertos creen que las fortificaciones de El Muro, en el Camín de La Mesa, pudieran quedar datadas en el mismo periodo


Las últimas conclusiones a las que han llegado los expertos, tras analizar y estudiar los hallazgos de las excavaciones en La Carisa y en las fortificaciones de El Muro, en el Camín de La Mesa, pudieran datar la gestación de las fronteras asturianas entre la segunda mita del siglo VII y los primeros años del VIII. Los resultados indican concretamente que el intervalo cronológico se sitúa entre los años 650 y 708.

Tales datos traducen, además, que la construcción de las obras defensivas de El Muro y al menos una parte de las de El Homón de Faro (en La Carisa), lejos de lo que se pensaba, son coetáneas. A esa conclusión se ha llegado gracias a cinco muestras de maderas y vegetales carbonizados mediante la más conocida de las técnicas, la denominada el C14, a la que se deben, además, las informaciones cronológicas sobre las guerras de conquista de los astures.

Jorge Camino, arqueólogo del equipo de investigación de ambos yacimientos, fue el encargado de presentar ayer los resultados recibidos del laboratorio de 'Beta Analityc' de Miami, en Florida (Estados Unidos).

Según él, los análisis se realizaron ante «la ausencia de materiales arqueológicos dotados de cronología corta». El C14 fue aplicado a restos de la muralla de El Homón y mediante acelerador de partículas para las muestras milimétricas de El Muro, insertas en el techo de los 'paleosuelos'.

Trascendencia histórica

Camino señaló que «la datación de El Muro supone la prueba de mayor antigüedad del Camín de la Mesa», que se creía posterior a La Carisa. Añadió, además, que «estas construcciones defensivas» enfatizan la trascendencia histórica de las vías de La Carisa y La Mesa en las comunicaciones de Asturias con la Meseta.

Además, con las nuevas conclusiones, se interpreta que las barreras defensivas son un cierre de las arterias estratégicas militares que unían Asturias con la meseta, cuyo origen se relaciona con «inestabilidad política, con la cuestionada expedición del rey visigodo Wamba contra los astures en 680», explicó el experto.

Otro investigador, Rogelio Estrada, narró que los enemigos de los astures habitaban a 200 metros de El Muro. Este dato deberá ser unido a otros futuros, ya que aún quedaban dos tercios de los territorios por investigar.

Estrada es de los que apuesta por la creencia de que «podría ser que la demarcación de las fronteras asturianas como 'nación' se establecieran en aquellos años», es decir, a finales del siglo VII

Los resultados de la campaña de 2005 fueron presentados ayer por el director general de Promoción Cultural, Carlos Madera; el arqueólogo del equipo de investigación de La Carisa y La Mesa, el mentado Jorge Camino y con ellos, el catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Oviedo Ignacio Ruiz de la Peña.