Siete monumentos italianos podrían derrumbarse

14/2/06 .- Correo del Caroní

World Monuments Fund denunció en su informe para el 2006 la precariedad de algunos edificios milenarios italianos.



Siete monumentos históricos de Italia figuran en la lista de los 100 monumentos del mundo amenazados de desaparición o de degradación irreversible realizada cada año por World Monuments Fund (WWF), una reconocida fundación privada estadounidense.

La entidad, fundada en 1965 para preservar el patrimonio cultural mundial, denunció en su informe para el 2006 la precariedad de algunos edificios milenarios italianos, que yacen a la merced del paso del tiempo.

La misma WWF reconoce que "hasta los monumentos más célebres del mundo están amenazados si no son correctamente mantenidos".

La institución definió como "alarmante" el deterioro del cementerio no católico de Roma, donde descansan entre otros, los poetas ingleses John Keats (1795-1821) y Percy Shelley (1792-1822) y el importante intelectual comunista italiano Antonio Gramsci (1891-1937).

La fascinante Villa de Adriano, cerca a Tivoli (a unos 30 km de Roma), una de las residencias más espectaculares del imperio romano, que fue numerosas veces destruida y reconstruida, está en malas condiciones y cubierta de vegetación.

Los responsables de su mantenimiento no logran reconstruirla ni conservarla, según la entidad.

En la región del Lazio, el burgo medieval de Civitá di Bagnoregio, apodado "la ciudad que muere", está desapareciendo gradualmente debido a las rocas volcánicas sobre las cuales está edificado, que se derrumban a pasos de gigante.

"Conectado al mundo por un único puente que sube hasta la cima de la colina, el pueblo sufrió hace años el éxodo de sus habitantes hacia la capital. Sin embargo, sigue atrayendo a numerosos turistas que sin querer aceleran el deterioro del lugar", precisó WWF.

En Pulia (sudeste del país), se encuentra la localidad de Margia dei Trulli, formada por seis pueblecitos de piedra seca con casitas con techos cónicos, un hábitat tradicional del siglo V a. C., cuyas chozas están abandonadas y amenazadas por la edificación de viviendas modernas.

En pleno corazón de Nápoles, se encuentra el palacio real de Portici, construido en 1740 por el rey Carlos III, que necesita una urgente restauración si no quiere acabar en ruina.

Existe temor por el posible derrumbamiento de la capilla Santa María in Stelle, en Verona (norte) del siglo II d. C., donde las filtraciones de agua y la falta de mantenimiento han dañado los frescos, considerados como los primeros realizados en la península.

Para terminar la lista, en Roma, a orillas del Tíber, la contaminación, el aire salino que llega de la costa (a 25 km del mar) y la lluvia arruinan la construcción hecha con piedras volcánicas y las pinturas del templo de Portunus, del siglo II a. C., el cual está en pésimas condiciones.

Ante la grave situación, el presupuesto del departamento de arqueología de Roma resulta muy "limitado", según la fundación americana.

Noticias relacionadas

Comenta la noticia desde Facebook

Comentarios

1 Con lo q cuesta cada bomba "inteligente" se podria restaurar cada una de estas maravillas....
Pero parece q nuestros gobernantes son mas propios para quemar bibliotecas(o dejarlas arder) que para conservarlas.
Comentario realizado por Carlos. 17/2/06 7:37h