Hallados restos de una villa romana y necrópolis medieval en la cola del pantano de Bornos

25/8/05 .- Sierradecadiz.com/

Noticias
Efectivos de la Guardia Civil pertenecientes al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Villamartín (Cádiz), han localizado a orillas del lago de Bornos cuatro fosas de inhumación individual con restos humanos, al parecer de una necrópolis musulmana de los siglos XII ó XIII y a unos mil metros de distancia de éstas, una villa romana de grandes dimensiones.


El descubrimiento de esos restos arqueológicos fue debido a la bajada del nivel de las aguas del pantano de Bornos, concretamente en el lugar conocido como 'El embarcadero', donde aparecieron restos óseos humanos deteriorados. La Guardia Civil informó de estos hechos a la Delegación Provincial de Cultura de la Junta en Cádiz, que envió a la zona a la arqueóloga provincial, Ana Troya, junto a un equipo de colaboradores, que, en un primer reconocimiento del terreno, localizaron cuatro fosas de inhumación individual con restos humanos, de la referida necrópolis musulmana y una posible quinta fosa, detectada por su coloración en el terreno. Igualmente, a unos mil metros de distancia de la necrópolis musulmana, fueron halladas unas estructuras bien delimitadas con muros de piedra, que podrían corresponder a una villa romana de grandes dimensiones.

De confirmarse la antigüedad de estos hallazgos, cobraría más fuerza la idea de la existencia de la ruta de ciudades romanas esbozada en el conjunto de la Sierra, hasta ahora compuesta por los yacimientos de Sierra de Aznar en Arcos, Carissa Aurelia en Espera, Iptuci en Prado del Rey, Ocuri en Ubrique, Lacilbula en Grazalema y Saepo en Algodonales, además de Ronda la Vieja. Los restos hallados en el lago de Bornos podrían formar parte de los enclaves del Conventus Gaditanus al que el historiador clásico Plinio adscribe Carissa Aurelia, descrita ya en la antigüedad como ciudad de derecho latino que tenía la capacidad de acuñar moneda propia, actividad también atribuida a la cerca Iptuci. Los enclaves romanos de la Sierra estuvieron comunicados a través de calzadas, algunos de cuyos tramos, tras su reutilización en época posterior, son aún transitables, como los que unen Ubrique y Benaocaz o los que parten de Villaluenga y Grazlema. En cuanto a los restos de época musulmana, se confirmaría la existencia de un enclave más en la amplia zona de la frontera castellano-musulmana de la comarca. En el entorno de Bornos aparecieron restos de vasijas y otros materiales. La frontera tiene en la actualidad son referencias principales conocidas en las fortalezas de Cardela en Ubrique, Aznalmara y barrio nazarí en Benaocaz, Zahara, Olvera (aunque la estrucutra del castillo actual parece ser de factura castellana) y Setenil, además de las murallas de Grazalema y Torre Alháquime y las antiguas calzadas romanas reutilizadas o modificadas en época medieval. El hallazgo de estos restos en Bornos se ha producido en unas circunstancias similares al del dolmen neolítico del pantano de los Hurones, en Ubrique. En este caso, la retirada de las aguas de este embalse permitió en 2002 dejar en evidencia el monumento megalítico, cuya excavación se inició a comienzos de este mes de agosto. Guerra Civil Independientemente de los restos antiguos y medievales detectados en el lago de Bornos, en el mismo entorno estaban visibles ayer unos restos humanos que algunos llugareños identificaron como de fusilados de la guerra civil. De confirmarse esta hipótesis, se trataría de una fosa común en la que habrían sido enterrados de manera clandestina varias víctimas de la sublevación. Este hallazgo pondría de nuevo de actualidad el asunto de la recuperación de la memoria histórica.

Noticias relacionadas

Comenta la noticia desde Facebook

Comentarios

No hay comentarios.