Cultura ultima el tratamiento de restos de murallas del Casco Histórico de Almería

Los torreones de las calles Impresores, Ruano, Valdivia y del Mar serán ahora señalizadas con paneles informativos

Forman parte tan connatural, incluso cuando se temía por su pérdida ante el progresivo deterioro, que, ahora ya tratadas para como mínimo mantenerlas en su estado actual de conservación, que resulta hasta difícil valorar la intervención que ha realizado la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía en ese sentido y que, en estos momentos, última en sus detalles.
Las actuaciones, que se han enmarcado en el Plan de Arquitectura Defensiva de Almería (PADA), ha incidido de una manera especial en la consolidación de los restos de muralla situados en las calles Impresores (situada en el cerco de la Almedina), en la Avenida del Mar, en la calle Valdivia y en la calle Ruano (la cerca del aljibe). Las actuaciones concretas, contempladas en el correspondiente proyecto de conservación, ha contado con un presupuesto total de 167.386,02 euros, según un comunicado oficial emitido ayer por la propia Delegación de Cultura.
Sin recrecidos
La actuación, que ha sido ejecutada por la empresa Rehabitec (especializada en el tratamiento de edificios singulares), ha consistido en la limpieza de fachadas, en la eliminación de materiales ajenos al muro original y en las reposiciones con mortero con la imitación del tapial original en las zonas en las que resultaba necesario recomponer su apariencia exterior. La intervención ha afectado asimismo a la consolidación superficial de paramentos de tapial, al sellado de fisuras y, en algún caso, al recrecido de cada una de estas torres.
El proyecto y, en consecuencia, las actuaciones determinadas han tenido en cuenta para las intervenciones particulares la pérdida en su estructura constructiva que prestaba el torreón de la calle Ruano y la restauración a la que ya habían sido sometidas con anterioridad las torres de la calle Valdivia y de la Avenida del Mar en el momento de proceder a sus respectivos limpieza y tratamiento restaurador.
Interpretación
La delegada provincial de Cultura, Yolanda Callejón, ante los resultados de esta intervención, ha destacado que esta iniciativa ha perseguido garantizar la conservación de los principales restos de fortificaciones y «nos ha permitido consolidar los elementos pertenecientes a la antigua muralla que todavía perduran en nuestra ciudad» al mismo tiempo que señalaba que las distintas actuaciones levadas a cabo no solamente conseguirán proteger y conservar estos elementos patrimoniales sino también difundirlos como símbolos del sistema defensivo de la ciudad que se ha mantenido desde la época medieval hasta nuestros días en distintos puntos del Casco Histórico.
En este sentido, Cultura tiene previsto completar la intervención con la señalización de las fortificaciones mediante paneles informativos, que posibiliten la interpretación y la divulgación de la importancia histórica de los elementos existentes. Y es que, según los resultados de todas las investigaciones, Almería contaba con un sistema defensivo que diferenciaba el centro de los arrabales, cuya cronología abarcaba desde el año 955 a la conquista cristiana. Las investigaciones han demostrado asimismo que la muralla que separaba los distintos arrabales de la ciudad fue en gran parte derribada entre los 1857 y 1862. Los restos fragmentados conservados, algunos de ellos, son los localizados precisamente en los antiguos barrios de la Medina y del Aljibe.
Uno de los motivos que han impulsado a la Consejería de Cultura a este tipo de intervención, centrada en la protección y en la conservación , reside en el hecho de que los restos de la fortificación se encuentran en el viario público urbano y, por tanto, con mayor nivel de un posible riesgo de utilización popular. Este elemento, a igual que el diferente estado de conservación de cada uno, ja jugado un papel decisivo en el proyecto de mejora, que también ha tenido en cuenta la serie de características que tienen todas en común.