Hallan restos de un templo religioso de la primera época cristiana en Calpe

Los veintidós voluntarios de diferentes nacionalidades que trabajan en el yacimiento arqueológico de Banys de la Reina, en Calpe, han descubierto una estructura que, por los materiales y tipo de construcción, podría ser un espacio religioso de la primera época cristiana. Así lo anunció ayer el director general del Instituto Valenciano de la Juventud (IVAJ), Marcos Alós, quien visitó este yacimiento para conocer los trabajos que se realizan. Según Alós, «este hallazgo está asociado a las tumbas que aparecieron en Banys de la Reina en 1996».


Este campo de trabajo, organizado por el IVAJ, se ha realizado en dos turnos este verano y cuenta en la actualidad con la participación de un total de veintidós jóvenes, de los cuales seis son francesas, dos turcos, dos holandeses, un alemán, una inglesa y el resto procedente de Cataluña, Comunidad Valenciana, Galicia, País Vasco y Andalucía.

Durante quince días los jóvenes desempeñan tareas de voluntariado en Banys de la Reina, un emplazamiento situado junto a la playa, que tiene una extensión aproximada de 5.000 metros cuadrados, de los cuales se ha excavado aproximadamente el veinticinco por ciento. Toda la zona se asienta sobre una formación de «duna fósil» que aflora en muchos puntos, constituyendo un tipo de roca fácil de trabajar por ser blanda, por lo que el lugar ha sido durante siglos una cantera.

El objetivo de este campo de trabajo es adecuar el entorno del yacimiento arqueológico, que supone un punto clave para conocer el doblamiento y las actividades económicas en el ámbito costero alicantino. Los voluntarios están excavando la zona más tardía del yacimiento, que data del siglo VI, guiados por una arqueóloga.

La arqueóloga encargada del proyecto, Ana Ronda, explicó que el principal vestigio descubierto el año pasado es un mosaico central formado por cerámicas provenientes de todo el Mediterráneo.

El director general del IVAJ destacó la importante labor de los jóvenes que participan en esta iniciativa, ya que contribuyen a recuperar las riquezas históricas de la Comunidad Valenciana.

Durante su estancia en el campo de trabajo, los jóvenes se alojan en el Colegio Público Azorín y se comunican en inglés y español.