Musulmanes en la Magdalena (Castellón)

Las 18 sepulturas están situadas a lo largo de una zanja de unos 25 metros de longitud.Numerosas personas visitaron los restos ayer aprovechando su estancia en el paraje.

En julio, iberos; en noviembre, romanos; ahora, musulmanes. Vestigios de tres antiguas civilizaciones han aparecido de forma escalonada en los últimos cinco meses en diferentes puntos del término municipal de Castellón. Primero fue en el entorno de la carretera Almassora; posteriormente, restos arquitectónicos romanos fueron destapados en el camino Villamargo; desde el pasado jueves, el escueto patrimonio antropológico de Castellón cuenta con un elemento más en el paraje de la Magdalena que refuerza su estrecho vínculo musulmán.

Las 18 sepulturas destapadas durante las obras de construcción de un sistema hidráulico de prevención de incendios permanecían ayer a la intemperie. La empresa encargada de los trabajos ha vallado el tramo de zanja que se asienta en un perímetro arqueológico de unos 25 metros. Numerosas personas que aprovecharon la jornada festiva para almorzar en el paraje natural se acercaron para curiosear y tratar de distinguir alguno de los esqueletos yacentes en posición de cúbito lateral derecho mirando al este, como marcan los cánones musulmanes.

La zona acotada se encuentra en las faldas de la Magdalena, justo en el margen derecho de la carretera principal de acceso al paraje, y carece de vigilancia. En la parte izquierda del vial se ubica el depósito subterráneo de almacenamiento de agua para extinción de incendios que aún está en fase de colocación del forjado.

En el momento en que fue hallada la necrópolis musulmana, la empresa trazaba la larga zanja en el perímetro del ermitorio para embocar las canalizaciones de agua. La decisión de la Conselleria de Cultura de modificar el proyecto constructivo retrasará varios meses la finalización de los trabajos, inicialmente previstos para finales del presente año.

castell vell // A escasos metros del nuevo hallazgo arqueológico, las excavaciones donde están enclavadas las antiguas murallas del Castell Vell siguen sin ser retomadas pese a que ya han transcurrido más de tres años desde que finalizara la anterior fase. La Generalitat prometió entonces nuevas actuaciones para consolidar las murallas y lienzos tapiales.