El castillo de Sant Martí de Centelles, testigo de once siglos de historia de Cataluña

11/8/09 .- http://www.universia.es

Fue un baluarte fronterizo en la época de la repoblación, residencia real durante la Guerra Civil Catalana, aconteció, así mismo, un enclave decisivo durante las guerras de los Segadors y de Sucesión, fue utilizado durante la Guerra del Francés, y se convirtió en madriguera de partidas carlinas durante el siglo XIX: el castillo de Sant Martí de Centelles (Osona) ha sido protagonista y testigo privilegiado durante once siglos de la historia de Cataluña.

El profesor del Departamento de Historia Moderna Àngel Casals coordina este verano una campaña de excavación arqueológica de este imponente recinto militar. El proyecto científico, promovido por el Ayuntamiento de Sant Martí de Centelles, lo coordina, por parte del Ayuntamiento, el historiador Jaume Oliver, y la excavación arqueológica propiamente dicha la dirigen los arqueólogos Anna Chávez e Isidre Pastor.

El objetivo, pues, es convertir el castillo en un recurso cultural y turístico que contribuya al desarrollo del municipio y de su entorno. A la vez, el proyecto pretende también generar conocimientos científicos de calidad con respecto al conjunto monumental y a su contexto histórico.

Terminados los correspondientes estudios históricos, arquitectónicos y geológicos, este año se está llevando a cabo en el castillo la primera campaña de excavaciones arqueológicas, que tiene como objetivo delimitar y estudiar el que tradicionalmente se ha considerado la residencia señorial dentro del conjunto fortificado. El año 2006 el Ayuntamiento de Santo Martí emprendió las tareas de estudio geológico del asentamiento del castillo y las prospecciones que permitieran identificar los elementos de las estructuras que restan de pie susceptibles de ser sometidos a campaña de excavación y revisión para comprobar la seguridad. Teniendo presente el tamaño del castillo, la campaña ha delimitado una zona de excavación correspondiente al que se supone que era parte del recinto noble cercano a la puerta de entrada. Lo que se ha encontrado hasta ahora es un gran edificio del cual no podremos saber qué uso se hacía hasta que no se desentierre totalmente.

El castillo de Santo Martí es uno de los ejemplos más importantes de fortificación medieval y moderna de nuestro país. La muralla tiene una longitud de aproximada de 200 metros y una anchura de 80 metros en la parte más grande. A pesar de que la mayor parte de la estructura que se conserva es de los siglos XV y XVI, la fortificación se origina en el periodo de repoblación que se inició a partir del siglo VIII, cuando los condes de Barcelona querían repoblar Osona. Originariamente fue un castillo fronterizo, al cual corresponde su primera estructura el Castillo Soberano, documentado ya en el siglo IX, en un punto elevado del edificio actual que se conserva.

Resistencia histórica

Entre los siglos IX y XV el castillo fue el centro de la poderosa baronía de los Centelles y, durante la Guerra Civil Catalana del siglo XV, fue escogido como residencia de Pere IV, denominado «el Conestable de Portugal», rey de los catalanes. En este periodo se alternaron los enfrentamientos bélicos por el control del castillo con los trabajos de ampliación y ornamentación necesarios para convertirlo en una residencia real.

Los poseedores han sido siempre de la familia de los Centelles, originarios de un cortijo de la zona que se ennoblecieron y convirtieron en feudatarios de los condes de Barcelona. Es el nombre de la familia que adoptarán las poblaciones más cercanas al castillo: Sant Martí de Centelles y Centelles. Posteriormente fue importante como plaza señorial, desde la cual se controlaba una extensa baronía que reunía los actuales municipios de Centelles, Sant Martí de Centelles, Tona y Suya, y que llegaba hasta el Vallès Oriental, controlando la entrada del valle de Congost y la llanura de Vic.

A lo largo de la historia el castillo fue confiscado a los Centelles y se convirtió en residencia real durante la Guerra Civil Catalana durante el periodo 1462-1472. Fue, además, punto de reunión de tropas en más de una ocasión durante la Guerra de los Segadors, y posteriormente (1640-1659), y también a comienzos de la Guerra de Sucesión (1705) fue la zona desde la cual los "miquelets vigatans" partidarios al archiduque Carles bloquearon las tropas filipistas del virrey Velasco. Durante la Guerra del Francés, las tropas francesas, en 1809, ocuparon la población de Centelles y el castillo. En el decurso de las guerras carlinas, las partidas lo convirtieron en uno de las madrigueras desde la cual atacaban las poblaciones vecinas.

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