Hallada una necrópolis en Fuente Álamo con restos de dos épocas (Puente Genil, Córdoba)

Hasta la fecha se han excavado 150 enterramientos (podría haber unos 400 en total) en la parcela donde se construirá el centro de visitantes del yacimiento

Nuevo descubrimiento en el yacimiento arqueológico de Fuente Álamo en Puente Genil. Con los trabajos de replanteo para la construcción del proyectado centro de visitantes se ha puesto al descubierto una necrópolis con enterramientos de dos épocas diferentes: la tardorromana -entre los siglos IV y VII- y la medieval islámica -siglos IX y X-. El hallazgo fue dado a conocer ayer por el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Puente Genil, Alberto Gómez, y el director de la excavación de la propia necrópolis, el arqueólogo David Jaén.

Según explicó Jaén, hasta la fecha ya se han localizado 150 enterramientos de ambas épocas, si bien en función de las prospecciones realizadas se estima que la necrópolis pueda albergar "hasta 400 tumbas". No obstante, los trabajos de excavación se están centrando en la parcela que ocupará el centro de visitantes, que podría dejar al descubierto en torno a 200 tumbas, por lo que se convertiría en una de las de mayores dimensiones existentes en la provincia de Córdoba, a excepción de la capital. Igualmente, el director de la excavación destacó como una singularidad que haya aparecido en un enclave rural, algo que "es poco común, al menos en la provincia".

Para datar la necrópolis se ha tenido en cuenta el tipo de cubierta y la orientación de las tumbas. Así, en las de época tardorromana se utiliza una tégula -teja romana- con una cubierta a dos aguas o plana. En cuanto a las islámicas, la teja es doble y el enterramiento está orientado al suroeste. Igualmente, la posición de los individuos en cada caso es diferente: de "cúbito supino" en el caso de las romanas y de "cúbito lateral derecho" en las de época musulmana. Según Jaén, el tipo de tumba islámica coincide con las de otra necrópolis existente en Tomares (en la provincia de Sevilla).

Una vez se excaven todos los enterramientos existentes en la zona delimitada -unos 800 metros cuadrados- se extraerá y recogerá toda la información relativa a los restos óseos y el tipo de cubiertas para que, posteriormente, se pueda construir el centro de visitantes. No obstante, según señaló el concejal de Cultura, si la necrópolis ocupa más extensión que la necesaria para las instalaciones a construir -como parece que se prevé-, la idea es dejar visible una parte (aunque en el interior del edificio del centro de visitantes se pueda exponer una muestra fotográfica y documental de la misma).

El estudio de los esqueletos que salgan a la luz permitirá obtener conocimiento sobre la población de la zona tanto de época musulmana como romana.