El Palacio del Real sale de nuevo a la luz (Valencia)

15/2/09 .- http://www.levante-emv.com

Más de 40 especialistas excavarán y mostrarán "in situ" la fachada palaciega en Viveros

El Palacio del Real de Valencia nació como almunia o pequeña Alhambra creada en el siglo XI para descanso y retiro del rey musulmán Abd al Aziz. Tres centurias después, Pere el Ceremoniós lo reedificó para convertirlo en residencia real hasta que, en 1810, fue demolido precipitadamente para evitar que las tropas francesas, a punto de llegar a la ciudad, lo utilizasen a modo de bastión durante la contienda. Y ahora, la premura de los valencianos de entonces puede ser la que permita a los actuales, 200 años después, admirar la fachada de una de las construcciones más míticas del cap i casal.
El Ayuntamiento de Valencia utilizará 1,2 millones de euros de los 141 millones que corresponden a la urbe del llamado Fondo Zapatero para recuperar el frontispicio meridional -situado a dos metros bajo tierra- de la desaparecida edificación, un proyecto elaborado por el Servicio de Investigación Arqueológica Municipal (SIAM) tras un exhaustivo estudio de varios años. Más de 40 especialistas, entre arqueólogos, peones de excavación, documentalistas, etc -hay un auténtico revuelo entre los profesionales del sector, ilusionados con la iniciativa-, sacarán a la luz a partir de abril unos 65 metros lineales de la fachada del Palacio del Real que, luego, deberán adecuar para su visita y contemplación in situ.
El objetivo es desenterrar parte de la torre suroriental que cerraba el llamado Reial Vell -el cuerpo palaciego más antiguo- y cuyo otro extremo surgió durante las excavaciones de 1986, cuando las obras de un colector en la calle General Elío destaparon un lateral de la regia construcción. Además de ese torreón, quedará al aire la puerta principal del palacio, la torre suroccidental y el pórtico que enlazaba ambas atalayas. Todo ello se encuentra dentro del recinto de Viveros, puesto que el proyecto no prevé trabajar fuera de la zona verde, ni siquiera en la acera de General Elío o en su calzada, según fuentes del SIAM.
Lo que aún se desconoce es qué quedó de la edificación tras el derribo, puesto que nunca hasta ahora se ha excavado el lugar. La previsión es que la cota del palacio permanezca relativamente elevada, en torno al metro como mínimo, debido a la propia dinámica de una demolición tan atropellada como la que se llevó a término en el siglo XIX.
Y es que los españoles tiraron al suelo a base de pico y pala los muros de la construcción sin detenerse siquiera a desescombrar.
Eso fue, a la postre, lo que detuvo su tarea destructiva antes de que las paredes quedasen arrasadas al nivel del suelo, puesto que los cascotes colmataron las estancias e impidieron proseguir con la demolición.
Precisión por los dibujos originales
La acumulación de derribos se produjo sobre todo en el patio del palacio, que se sobreelevó hasta convertirse en la actual muntanyeta de Elío, presumiblemente conformada con los restos de la antigua construcción. Para sacar a la luz el frontis palaciego, los arqueólogos utilizarán los planos que el profesor Josep Vicent Boira encontró en la Biblioteca de París y que permiten perforar el subsuelo sabiendo ya lo que se va a encontrar allí.
De esta forma la excavación se llevará a cabo con notable precisión, lo que salvaguardará la riqueza arbórea de la zona; o al menos buena parte de ella.
La fachada del derrocado Palacio del Real se encuentra al borde de uno de los viales internos de Viveros, lo que apenas afectará a los árboles, aunque es más que probable que algún ejemplar tenga que ser sacrificado, a no ser que la Concejalía de Parques y Jardines, con la que se coordinarán los trabajos arqueológicos, disponga una solución alternativa.

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