Aparecen una cruz y una vaina de bronce en la excavación de Fisterra
3/9/08 .- www.lavozdegalicia.es
Quince metales y otros tantos clavos, además de cientos de trozos de cerámica completan las investigaciones
La intervención arqueológica en San Guillermo, a punto de acabar con resultados excepcionales
Las excavaciones en el entorno de la ermita de San Guillermo no dejan de sorprender día tras día. Salvo que llueva mucho, como ocurrió ayer, los hallazgos se suceden sin parar desde que la intervención comenzó hace casi un mes.
Si la semana pasada lo más espectacular fue una pequeña reproducción de una figura del Apóstol realizada en azabache y datada en la Edad Media (período bajo, entre los siglos XIII y XV), lo que refuerza aún más la secular vinculación xacobea de Fisterra, en los últimos días se han producido (entre otros) dos hallazgos que colocan al monte de Fisterra como uno de los puntos más interesantes de Galicia desde el punto de vista de las excavaciones que se llevan a cabo en la actualidad.
Por una parte, el equipo arqueológico ha encontrado una cruz de bronce de unos ocho centímetros de largo, tres de brazo corto y 1,5 de grosor. Se encuentra en buen estado de conservación, e incluso se aprecia decoración en los brazos. Al final de cada uno se ven unas terminaciones como rematadas en bola. Según la arqueóloga Lorena Vidal, necesita un «tratamiento urgente» para evitar su deterioro, debido a una especie de cloruros que degradan de dentro hacia fuera. Cuando se quite ese óxido (técnicamente no lo es) la pieza ya quedará a la vista y podrá indagarse sobre su tipología. En todo caso, como el resto, se situaría entre los siglos XIII y XV.
El equipo de excavación también ha hallado una vaina, igualmente de bronce, y creen que su función era guardar un puñal por las dimensiones que tiene. Parece que falta un trozo, pero no debía de ser mucho más grande. También presenta una cierta decoración, con calados con forma de media luna. En su parte posterior se aprecian dos perforaciones circulares que servirían para engancharla al cinturón. Como la cruz, precisa una limpieza.
El Apóstol, la cruz o la vaina son hallazgos importantes, pero no los únicos. Al contrario, el material es abundante. Hay (de momento) centenares de trozos de cerámica, 14 monedas, ocho lascas de sílex, 15 piezas diversas de metal y otros tantos clavos, además de plaquitas de bronce y un alfiler del mismo material, con la cabeza circular decorada.
La intervención arqueológica en San Guillermo, a punto de acabar con resultados excepcionales
Las excavaciones en el entorno de la ermita de San Guillermo no dejan de sorprender día tras día. Salvo que llueva mucho, como ocurrió ayer, los hallazgos se suceden sin parar desde que la intervención comenzó hace casi un mes.
Si la semana pasada lo más espectacular fue una pequeña reproducción de una figura del Apóstol realizada en azabache y datada en la Edad Media (período bajo, entre los siglos XIII y XV), lo que refuerza aún más la secular vinculación xacobea de Fisterra, en los últimos días se han producido (entre otros) dos hallazgos que colocan al monte de Fisterra como uno de los puntos más interesantes de Galicia desde el punto de vista de las excavaciones que se llevan a cabo en la actualidad.
Por una parte, el equipo arqueológico ha encontrado una cruz de bronce de unos ocho centímetros de largo, tres de brazo corto y 1,5 de grosor. Se encuentra en buen estado de conservación, e incluso se aprecia decoración en los brazos. Al final de cada uno se ven unas terminaciones como rematadas en bola. Según la arqueóloga Lorena Vidal, necesita un «tratamiento urgente» para evitar su deterioro, debido a una especie de cloruros que degradan de dentro hacia fuera. Cuando se quite ese óxido (técnicamente no lo es) la pieza ya quedará a la vista y podrá indagarse sobre su tipología. En todo caso, como el resto, se situaría entre los siglos XIII y XV.
El equipo de excavación también ha hallado una vaina, igualmente de bronce, y creen que su función era guardar un puñal por las dimensiones que tiene. Parece que falta un trozo, pero no debía de ser mucho más grande. También presenta una cierta decoración, con calados con forma de media luna. En su parte posterior se aprecian dos perforaciones circulares que servirían para engancharla al cinturón. Como la cruz, precisa una limpieza.
El Apóstol, la cruz o la vaina son hallazgos importantes, pero no los únicos. Al contrario, el material es abundante. Hay (de momento) centenares de trozos de cerámica, 14 monedas, ocho lascas de sílex, 15 piezas diversas de metal y otros tantos clavos, además de plaquitas de bronce y un alfiler del mismo material, con la cabeza circular decorada.
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Comentarios
1
El pueblo tiene derecho a kedarse con los ayazgos arkeologicos por lei y por lazos de identidad. Cuando estaran a la vista del publico. Y otra cosa los antepasados dicen k ademas de la ermita hay mas donde excavar en sus alrededores los antiguos lo decian sigiendo la linea dlos dolmes hacia el faro.
Porke no se enseñan ls fotografias de los ayazgos
El pueblo tiene derecho a kedarse con los ayazgos arkeologicos por lei y por lazos de identidad. Cuando estaran a la vista del publico. Y otra cosa los antepasados dicen k ademas de la ermita hay mas donde excavar en sus alrededores los antiguos lo decian sigiendo la linea dlos dolmes hacia el faro.
Comentario realizado por
Mar.
8/9/08 12:21h
2
Estimada Mar:
Lo de que "el pueblo tiene derecho a quedarse los hayazgos" no es del todo correcto. Trato de explicarme:
Cuando se va a realizar una excavación arqueológica, es siempre preciso justificar el motivo de la excavación (que es siempre relacionado con la investigación y, contrariamente a lo que se tiende a pensar, nunca una mera "búsqueda de tesoros"). Entonces, es preciso pedir una autorización a las instituciones competentes para poder comenzar las labores de excavación, y entre muchas cosas, las autoridades indicarán al arqueólogo responsable del proyecto, a qué museo ha de destinar los elementos encontrados en la excavación.
Una vez terminada la intervención en el yacimiento, comienza un trabajo mucho más largo, que es la de el estudio de los elementos materiales encontrados, su relación con el lugar, etc. A continuación, se publican los trabajos de investigación realizados. Y los "artefactos" encontrados en el yacimiento, no se quedan en el pueblo (de hecho, hasta donde yo se, en Fisterra no existe un museo), sino en el museo asignado por las autoridades pertinentes. En este caso, los materiales encontrados en la excavación de San Guillermo, se hallan en el museo arqueológico de A Coruña. Pero todavía no están expuestos, sino que están siendo objeto de estudio , que es precisamente, como te decía antes, el verdadero objeto de la excavación arqueológica.
Aprovecho para remarcar este último punto, ya que está extendida una idea errónea acerca de la arqueología:
La arqueología, y por extensión una excavación arqueológica, no consiste en una mera "búsqueda de tesoros". Contrariamente, es sólo una parte de una investigación histórica, en la que la excavación pretende encontrar pruebas o elementos que nos permitan saber más sobre un tema en concreto.
Nos queda esperar -en mi caso ansiosamente- a que se publiquen los resultados de las investigaciones sobre este magnífico enclave.
Un saludo.
En respuesta al comentario anterior
Estimada Mar:
Lo de que "el pueblo tiene derecho a quedarse los hayazgos" no es del todo correcto. Trato de explicarme:
Cuando se va a realizar una excavación arqueológica, es siempre preciso justificar el motivo de la excavación (que es siempre relacionado con la investigación y, contrariamente a lo que se tiende a pensar, nunca una mera "búsqueda de tesoros"). Entonces, es preciso pedir una autorización a las instituciones competentes para poder comenzar las labores de excavación, y entre muchas cosas, las autoridades indicarán al arqueólogo responsable del proyecto, a qué museo ha de destinar los elementos encontrados en la excavación.
Una vez terminada la intervención en el yacimiento, comienza un trabajo mucho más largo, que es la de el estudio de los elementos materiales encontrados, su relación con el lugar, etc. A continuación, se publican los trabajos de investigación realizados. Y los "artefactos" encontrados en el yacimiento, no se quedan en el pueblo (de hecho, hasta donde yo se, en Fisterra no existe un museo), sino en el museo asignado por las autoridades pertinentes. En este caso, los materiales encontrados en la excavación de San Guillermo, se hallan en el museo arqueológico de A Coruña. Pero todavía no están expuestos, sino que están siendo objeto de estudio , que es precisamente, como te decía antes, el verdadero objeto de la excavación arqueológica.
Aprovecho para remarcar este último punto, ya que está extendida una idea errónea acerca de la arqueología:
La arqueología, y por extensión una excavación arqueológica, no consiste en una mera "búsqueda de tesoros". Contrariamente, es sólo una parte de una investigación histórica, en la que la excavación pretende encontrar pruebas o elementos que nos permitan saber más sobre un tema en concreto.
Nos queda esperar -en mi caso ansiosamente- a que se publiquen los resultados de las investigaciones sobre este magnífico enclave.
Un saludo.
Comentario realizado por
Alejandro.
19/4/09 13:21h
