Plan Director del Castillo de Tobarra

Castillo de Tobarra

La consejería de Cultura de la Junta deComunidades de Castilla-La Mancha, subvenciona la redacción del proyecto de redacción del Plan Director del Castillo de Tobarra, que desde hace unos meses está siendo restaurado

G. GONZÁLEZ
El delegado provincial de la consejería de Cultura, de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Evaristo Navarro, ha comunicado al alcalde, Manuel Valcárcel, la concesión de una ayuda de la dirección general de Patrimonio y Museos, para la realización de un proyecto de redacción del Plan director del Castillo de Tobarra, por un montante de 9.000 euros.

El proyecto es la continuación a las obras realizadas en los últimos meses, a instancias del Ayuntamiento, para consolidar de forma urgente «el único lienzo que queda en pie de una de las torres del Castillo de Tobarra, denominado popularmente como los Ojos del Diablo, dentro de las labores de conservación del patrimonio histórico artístico de la localidad». Se trata de unos restos del Castillo almohade, muy populares en el municipio, y que necesitaban con urgencia que se tomaran medidas ante la posibilidad de derrumbe de dicha torre. Están situados en el Cerro de la Encarnación, a pocos metros del Santuario, y en la actualidad sólo quedan vestigios del mismo.



mal estado. Según el informe previo a las obras de consolidación «el lienzo de la torre» presentaba «un mal estado de conservación», de ahí que fuese necesario adoptar una decisión urgente a fin de evitar su derrumbe.

El presupuesto de la intervención de urgencia, superó los cuarenta y seis mil euros, siendo las dos partidas más importantes las de «consolidación estructural», presupuestada en 15.000 euros, y la de «Trabajos Arqueológicos», por un montante total de 9.800 euros.

En el estudio previo realizado, se explicaba que el muro se construyó con tapial de tierra y cal:«la pérdida de la costra de cal, ha hecho que el muro se deshaga poco a poco, quedando en pie sólo parte de las esquinas y la parte baja del mismo, amenazando ruina y el derrumbe en un corto espacio de tiempo, si no se toman las medidas para conservarlo».



cerámica. En los trabajos de conservación del lienzo que queda en pie, que llevaba emparejado un estudio arqueológico, aparecieron vasijas de cerámica, que están siendo estudiadas y catalogadas. En la memoria valorada del proyecto de intervención se explicaba que se estudiaría el suelo en una zona de aproximadamente 70 metros cuadrados, alrededor de la torre, incluyendo la misma, para poder averiguar su morfología inicial.

Una vez realizados los trabajos arqueológicos, «se decidió cómo levantar parte de las esquinas, con la idea de reforzar el lienzo, dándole la vuelta a dichas esquinas, y reparando, con la misma técnica, el tapial, decidiéndose por último, si la excavación se cerraba o no».