Los arqueólogos piden «mano dura» contra la venta de patrimonio arqueológico por internet

De atentado al patrimonio. Así calificaron ayer Amics del Museu de Menorca y la Societat Històrico-Arqueológica Marí i Bella la venta por internet de hallazgos romanos presuntamente expoliados en yacimientos de Menorca.

«No es un hecho nuevo», coincidieron en valorar ambas asociaciones. Alberto Coll, miembro fundador de la Martí Bella, advirtió que «lo positivo es que se denuncien estos casos, ya que pueden disuadir a futuros furtivos». En el mismo sentido, Coll se congratuló que «las instituciones no bajen la guardia ante estas prácticas».

Asimismo, arqueólogos y filántropos tienen sus propias recetas para atajar la compraventa fraudulenta de patrimonio. «Hay que tener una política educativa importante, desde niños concienciar de la importancia de las piezas», prescribió. Por su parte, Mateu Martínez, presidente de la sociedad Amics del Museu de Menorca, recomendó «denunciar inmediatamente a las autoridades si se observan individuos con detectores de metales en los yacimientos de la isla».

Precisamente, el también exconseller insular de Cultura quiso destacar las nefastas consecuencias del robo de reliquias. «La gente que hace esto consigue que no nos podamos aprovechar del conocimiento», valoró. «Los materiales son palabras en el libro de la historia. Si las quitamos no podremos leer ni interpretar estos textos», explicó Martínez.

Con todo y pese al daño ocasionado, los expertos admiten la dificultad de proteger los filones arqueológicos. «En la Isla hay unas 1.400 zonas declaradas Bienes de Interés Cultural. Es imposible controlarlas todas», reconoció el responsable de la entidad.

Ambos profesionales respondieron así a la venta por la página E-Bay de medio millar de piezas romanas, presuntamente de procedencia balear, del siglo I y II a.c., que trascendió ayer.