El yacimiento de Torrealquería es una aldea de enorme potencial

El arqueólogo José Antonio Santamaría destaca que es un yacimiento muy importante por extensión y por sus estructuras conservadas en buen estado. “No estamos hablando de una casita, es una aldea, aunque no sabemos aún el tamaño”.

La confirmación por parte de la Junta de la importancia del yacimiento, tras una visita de sus técnicos a petición de diariolatorre.es que les informó de su estado, ya está produciendo numerosas reacciones. En primer lugar hemos acudido a la persona que nos informó de esta situación, el arqueólogo alhaurino y vicepresidente de la asociación Puente del Rey, José Antonio Santamaría, para conocer su impresión por tan buena noticia.



Santamaría asegura que el Ayuntamiento ya conoce el valor del yacimiento porque él mismo lo incluyó en el catálogo que realizó para el Ayuntamiento hace varios años. Este catálogo no solo incluye su descripción con texto y fotos, sino incluso coordenadas UTM que delimitan el espacio. “Otra cosa es que el Ayuntamiento la esté utilizando o teniendo en cuenta antes de que se construya en la zona”, afirma crítico el arqueólogo.



Como resultado de esta inspección y la valoración de los vestigios, concretamente los técnicos de la Junta han constatado “que existen restos en superficie, que se observan con claridad, apreciándose diversas estructuras tanto en la superficie del carril como en el perfil”, afirmando que “se han conservado restos de gran potencia estratigráfica”.
La administración autonómica, competente en esta materia, ha informado a diariolatorre.es que ha comunicado al Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre que tome “las medidas necesarias que garanticen la conservación de los restos, así como su inclusión en el planeamiento municipal. Por otro lado, la existencia del carril sobre los mismos es un elemento de constante degradación del yacimiento, por lo que es necesario que se aporte tierra sobre los restos emergentes o buscar un trazado alternativo que no incida de forma directa en el sitio”.



Para Santamaría la importancia del yacimiento es enorme: “No estamos hablando de una casita, es una aldea, aunque no sabemos el tamaño, las fuentes modernas citan la pila bautismal de época cristiana, posiblemente haya una mezquita, todo induce a pensar que no es una casita de campo sino algo más grande”.

Incluso su valor puede ser tal, que puede ser mayor que los únicos restos hasta ahora tenidos en cuenta, los restos de la torre vigía musulmana y del antiguo cortijo del conde de Mollina, célebre porque aquí fue capturado el general liberal Torrijos en 1831. Santamaría se pregunta "¿qué es más importante, un cortijo del siglo XIX o un cortijo del siglo XII? La estratigrafía pone al descubierto restos de la época nazarí, almohade, califal, emiral, romano, incluso he encontrado en la zona cerámica prerromana”.



Según la Ley de Patrimonio Histórico Español, antes de que se haga cualquier reconstrucción de la alquería tienen preferencia los restos arqueológicos y soterrados.

A la pregunta de lo que deben hacer ahora a su juicio las dos administraciones, Santamaría dice que, “primero, si no está realmente protegida la zona en las NNSS o en el Avance del PGOU, protegerlas aunque la Junta ya lo tiene como yacimiento y está pidiendo al Ayuntamiento que lo incluya. Es potestad del Ayuntamiento que aquí no se construya”.



“Si aún así el Ayuntamiento y las asociaciones tienen interés en recrear el cortijo, lo primero que debe hacerse es una campaña de excavación arqueológica, abrir al menos en superficie la parte donde se pretende actuar cercana a la torre, y si lo que aparece tiene la suficiente importancia como para sea conservado ahí no se puede construir. Si se interviene en condiciones se sacaría todo un poblado, un pequeño Alhaurín que está tan bien conservado que sería visitable. Puesto en valor el conjunto tendría un gran poder de atracción turístico y cultural, tenemos el molino de aceite, la mezquita, aljibes, la torre vigía, estructuras bajo la torre, el conjunto en sí es museable”.



Preguntado sobre la posibilidad de que no se realice a corto plazo una excavación para ver su importancia, el arqueólogo responde “Si no hay un proyecto de intervención sobre el sitio no pasaría nada porque el yacimiento se quedaría enterrado, pero como sabemos que se va a intervenir por el proyecto geriátrico y el por el mismo de reconstrucción del cortijo, habría que hacer antes una excavación arqueológica para ver lo que tenemos entre manos”.



Sobre quién tiene que hacer esta excavación afirma: “Obviamente técnicos arqueólogos. Si hay una empresa privada que quiere promover la construcción, esta empresa privada es la que debe pagar la intervención, previo proyecto de intervención autorizado por la Junta. Realmente el potencial arqueológico es tan grande que ahí no se debería construir, todo lo contrario habilitar el espacio y poner en valor el yacimiento. En Benalmádena por ejemplo hay una villa romana y la están poniendo en valor para que sea visitable. Aquí tenemos la villa romana de Taralpe, aunque aún no se ven los resultados”.