Hallan un yacimiento al reanudar la autovía del aeropuerto (Ibiza)

Afectados por las expropiaciones aseguran que las instituciones no les han informado. Se reformará la rotonda de La Ponderosa


La reanudación de las obras en el último tramo de la autovía del aeropuerto -iniciadas hace dos días- ha puesto al descubierto un nuevo yacimiento arqueológico, consistente en al menos una decena de zanjas de cultivo de época romana, pertenecientes al siglo I o II dC, similares a las descubiertas en varias partes de la isla con motivo de la construcción de las autovías.

Los restos han aparecido cerca de la necrópolis musulmana que se ha decidido conservar in situ por su extensión, importancia y buen estado de conservación.
En cuanto a las zanjas de cultivo romanas descubiertas ahora, el director general de Patrimonio, Josep Maria Garí, confirmó que están siendo adecuadamente excavadas y estudiadas para, posteriormente, adoptar una decisión sobre su futuro.

Garí, en todo caso, recordó que estas acequias de cultivo «no tienen un valor monumental y, en realidad, han aparecido por todas partes en el Pla de Sant Jordi». No descartó que «algún sector» de las que han sido descubiertas hasta la fecha pueda ser conservada en su emplazamiento original.

Inicio de las obras y de las críticas

Por otra parte, desde ayer permanece a exposición pública el proyecto de terminación de la autovía del aeropuerto, desde el nuevo enlace de Can Fonoll hasta el bar La Ponderosa. En este último punto se reformará el actual cruce, mediante la construcción de una rotonda. Entre ésta y Can Fonoll se creará otra rotonda, según figura en los planos.

Fuentes del Consell destacaron la «gran reducción» de la superficie afectada por las expropiaciones en esta segunda versión del proyecto.

Precisamente, vecinos citados por la agencia Efe denunciaron ayer que serán expropiados sin que se les haya informado de que los trabajos iban a comenzar. José Pavón, encargado de un negocio de la zona, afirmó que su empresa no aparece en el listado hecho público, pese a lo cual ya se estaba trabajando ayer en la propiedad sin comunicado previo.

«No nos han avisado de nada. A nosotros nos afecta mucho, sobre todo en la zona donde hasta ahora aparcábamos los coches, pero todavía no sabemos nada», informó este afectado.

«Por aquí sólo ha pasado el alcalde de Sant Josep, quien a título personal nos ha mostrado su apoyo, y el conseller de Movilidad, Albert Prats, que no daba crédito a que los trabajos hubiesen comenzado ya».

Otros afectados por las expropiaciones se mostraron también molestos por la falta de información. Todos ellos coincidieron, sin embargo, en que la ampliación de este último tramo de la carretera era necesario.