La aparición de restos medievales ralentiza la obra de la calle Serafín (Segovia)

Aunque hasta ahora solo han salido a la luz diferentes estructuras de muros de la antigua trama urbana medieval de la ciudad, no se descarta el hallazgo de vestigios de origen romano


La excavación previa a la instalación de los contenedores soterrados en la calle Serafín ha comenzado a deparar los primeros descubrimientos arqueológicos. Por el momento, y a tenor de la primera impresión de los arqueólogos que controlan la obra, los hallazgos no se antojan especialmente importantes, en tanto que solo se han puesto al descubierto restos de estructuras medievales, aunque no se descarta que puedan aparecer vestigios de época romana.

La concejala de Medio Ambiente, Paloma Maroto (PSOE), explicó ayer que se estaba realizando el control arqueológico en el hueco del contenedor, parcialmente excavado, y que se estaba documentando hasta la mitad de su longitud. Hasta el momento, los arqueólogos Isabel Marqués y Miguel Yuste han observado la existencia de diferentes estructuras de muros asociadas a la traza urbana medieval de la antigua ciudad de Segovia, así como una estratigrafía del terreno que iría desde la edad contemporánea al mundo romano.

Lo cierto es que, por el momento, no se ha encontrado ningún resto de origen romano, aunque no se descarta que, conforme avance la excavación, puedan aparecer materiales de adscripción cultural romana. Es más, se trata de una posibilidad real, teniendo en cuenta la cercanía de la calle Serrafín con la Plaza del Potro donde, también con motivo de la excavación de otro foso para un contenedor soterrado, quedó al descubierto la cimentación de un edificio romano, posiblemente público. En caso de que se confirme que este edificio situado en la Plaza del Potro es público se uniría a la lista en la que también figura el yacimiento de la Plaza de Guevara —excavado entre 1994 y 1996—, muy cercana también a la calle Serafín.

Maroto explicó que un arqueólogo estará presente en la obra para controlar la tarea de la máquina excavadora y para realizar, al mismo tiempo, la limpieza de los estratos y posibles piezas que pudieran aparecer para realizar una primera valoración in situ. Aunque, por el momento, no se contempla paralizar la obra, el análisis y tratamiento de los primeros restos y la posibilidad de hallar nuevos descubrimientos hará que los trabajos se desarrollen con mayor lentitud de lo inicialmente previsto.

La concejala se mostró ayer ya resignada ante el hecho de que la obra sufrirá retrasos y que habrá, en consecuencia, que prolongar durante la próxima semana el cierre al tráfico de la calle. No obstante, este fin de semana, coincidiendo con el parón de las máquinas, la calle Serafín será reabierta al paso de los vehículos.