La documentación patrimonial desde el siglo XIII se llevará al nuevo archivo (Lorca, Murcia)

Se ubica en el reconstruido palacio de Alburquerque y abrirá antes de fin de año Más de 10 kilómetros de estanterías dan capacidad de almacenaje para 70 años

Las obras de la nueva sede del archivo histórico, en el reconstruido palacio de Alburquerque, ya han concluido y está previsto que la actividad comience en el inmueble antes de que finalice el año, según avanzó ayer el alcalde, Leoncio Collado, durante una visita a las nuevas dependencias.

Acompañado de representantes de distintas asociaciones culturales del municipio, recorrió el edificio, aún vacío, y explicó que será dotado de mobiliario en los próximos meses, antes de proceder al traslado de los documentos.

El alcalde recordó que la casa de la calle Selgas donde se ubicará el nuevo archivo fue adquirida por el Ayuntamiento por un importe de 420.000 euros y que las obras de rehabilitación y acondicionamiento han supuesto una inversión de tres millones, a los que habrá que sumar la cuantía del equipamiento y mobiliario.

El inmueble del siglo XVI, con una superficie de 872 metros cuadrados y tres plantas, ha sido demolido en su interior, por lo que sólo se mantienen todas las fachadas originales. A él, se ha sumado un edificio de nueva planta, construido en el solar contiguo, donde se han instalado todas las salas de almacenamiento.

El nuevo archivo, que contendrá el patrimonio documental de Lorca desde el siglo XIII, dispondrá de una superficie lineal de archivos de documentos de 10.000 metros, frente a los 2.500 actuales, lo que garantiza su capacidad de acumulación para los próximos 60 o 70 años.

El edificio dispone de tres plantas, la primera de ellas de 715 metros cuadrados y destinada a vestíbulo, sala de lectura para investigadores y almacén; la segunda, de 724 metros, acogerá las salas de distribución, encuadernación, digitalización, laboratorios y salas fotográficas; y la tercera se destinará a ascensores y aseos, además de una terraza con los sistemas de climatización.

El nuevo archivo multiplicará por cinco el espacio destinado a la custodia de documentos, ya que dispondrá de 10 kilómetros de estanterías, mientras que el actual sólo tiene 2.000 metros. Collado, durante el recorrido que realizó señaló que con el nuevo inmueble se podrán «guardar de forma profesional» los documentos de la historia de la Ciudad. Y anunció que la calle Selgas se convertirá en un «referente del patrimonio y la cultura».