La Alcazaba omeya de Marbella: El monumento menos conocido se hace valer

Reportaje de Adolfo Valenzuela

La plaza de Los Naranjos sigue encabezando la lista de lugares de interés para los turistas que visitan Marbella. Sin embargo, muchos obvian que a tan sólo 50 metros se encuentra La Alcazaba, conocida popularmente como El Castillo, el elemento más palpable que sobrevive de la época medieval. Con la intención de recuperar la fortificación omeya para uso y disfrute de los ciudadanos, la comisión gestora ha encargado un Plan Director, según explica el vocal de Cultura, Francisco Moreno (PSOE).

El documento, encargado a la empresa especializada Yamur, "analizará los problemas más acuciantes" que padece la construcción, "propondrá posibles medidas correctoras" y "regulará los usos compatibles en el perímetro acotado por los viejos muros". Moreno explica que el Plan Director tendrá "una trascendencia importante" en la investigación de la historia de Marbella porque "en el subsuelo de La Alcazaba se encontrarán indicios y respuestas del pasado más remoto".

Los trabajos, que durarán aproximadamente 14 meses, serán similares a los que la empresa ha llevado a cabo en los castillos de Cañete La Real y Teba. Sus arquitectos, Pedro Gurriarán y Salvador García, aseguran que se realizarán estudios urbanísticos de accesibilidad y movilidad, así como proyectos que permitan recorrer los interiores del monumento, algo que en la actualidad resulta imposible.

El responsable de Cultura comenta que la gestora ha podido desembolsar los 14.000 euros que supone la redacción del Plan Director, pero advierte que la puesta a punto del monumento, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por la Junta de Andalucía en 1985, precisará de inversiones "millonarias" por parte de la administración autonómica y central.

En opinión de Moreno, esas ayudas están más que justificadas porque, además de proteger el legado histórico del municipio, El Castillo se puede convertir en "un activo imprescindible para el desarrollo cultural y económico" de la zona.

Para este análisis profundo, los arquitectos afirman que se realizarán estudios de tipo topográfico, histórico, evolutivo, arqueológico y hasta parietal. Por esta razón, el Plan Director obligará a mantener relaciones con otros profesionales de otras disciplinas como urbanistas, fotógrafos, botánicos e historiadores.

En cuanto al estado actual de salud de La Alcazaba, el vocal considera que es "bueno", aunque ha soportado destrucciones llevadas a cabo por la urbanización sistemática del cuadro bajo, las demoliciones provocadas a raíz de la apertura de la calle Escuela y, como es obvio, el descuido y la falta de atención que hacen a sus estructuras presa fácil de los elementos, el viento y la vegetación.

MARBELLA

Turismo. La gestora encarga un Plan Director para la Alcazaba con la intención de detectar sus problemas y convertirla en un atractivo turístico