Un estudio aconseja tirar las casas pegadas a la muralla de Manzaneda (Lemos, Orense)

Las obras en un edificio derribado permiten ver uno de los contrafuertes rectangulares. Según el plan del Concello, esos inmuebles son del siglo XX y de dudosa legalidad


En la villa de Manzaneda los dueños de una de las casas pegadas a la muralla decidieron derribarla. El hecho de tirar el viejo inmueble deja a la vista uno de los dos contrafuertes rectangular de la cerca medieval. El Concello tiene la oportunidad de hacer que el principal monumento de la villa quede cada vez más libre si aplica el estudio por él encargado y financiado por la Xunta. Ese documento se titula Estudio histórico y propuesta de actuación sobre la muralla medieval de Manzaneda, que data del año 1991.

La administración local puede actuar si quiere porque ya en otros casos similares expropió otras casas intra y extramuros, dos inmuebles. Además, son los ayuntamientos los primeros que por ley han de velar por la protección del patrimonio histórico que les compete. La casa ahora derribada, estaba cerrada, es la número 53 y se halla en la calle Porta de Abaixo.

El estudio que obra en el archivo municipal desde hace 15 años, dice que la recuperación de esta fortificación exige la desaparición de una serie de construcciones sin valor arquitectónico, tampoco estético y mucho menos ambiental, adosadas extramuros. El proyecto considera que por lo menos a un corto plazo esas casas deberán desaparecer para permitir la contemplación del monumento que circunda buena parte de la villa. Asimismo se propone crear un espacio urbano alrededor para esparcimiento ciudadano.

El estudio dice que todas esas casas que afean e impiden ver la fortaleza datan del siglo XX y que su construcción «no siempre se ha hecho al amparo de la legalidad».

La propuesta que el Concello puede afrontar si se lo propone, hace una clasificación de edificios a desaparecer. Así señala como inmuebles a eliminar de forma inmediata los números 67, 69 y 70; edificios para desaparecer a medio plazo, los numerados del 50 al 63, que siguen pegados a la muralla por la calle Cavarca. También se indica como edificios de posible desaparición el 59, que es la propia Casa do Concello y el número 71. Todavía se menciona otra serie de inmuebles sujetos a normativa con limitaciones, los que llevan los números del 1 al 49, adosados al monumento intramuros.

Calle Cavarca

Esta propuesta que el Concello de Manzaneda posee pretende eliminar toda casa pegada a la muralla por Cavarca de tal forma que sólo quedaría la sede municipal. La histórica cerca en toda esa vía estaría a la vista del público con amplia zona ajardinada y luciendo dos contrafuertes. Llevaría césped, parterres y pavimento de piedra en la acera y plazuelas que flanquearían la sede municipal.

El proyecto encargado por el propio Concello en 1991 recomienda que mientras no se materialice la adquisición de casas o su expropiación, todos estos inmuebles sean considerados como fuera de ordenación debiendo prohibirse la realización de obras de mejora o ampliación y, por tanto, cualquier acción que aumente el valor de expropiación o compra. Sólo se tolera, según ese proyecto, obras de pura conservación como retejado, pintura¿ pero no derribo.

La norma general es que en la actuación sobre la muralla, se evitará toda reconstrucción, optándose solamente por acciones de consolidación de los restos existentes, trabajos garantizados por la Comisión Provincial de Patrimonio.