Llodio desarrollará el potencial de Santa Lucía con un plan especial (Álava)

Tratará de definir los usos de una zona rica en restos arqueológicos y etnográficos

Llodio cuenta con un potencial turístico, etnográfico y cultural en el entorno de Santa Lucía que todavía está por desarrollar. Durante los últimos años, el Ayuntamiento se ha volcado en obtener los terrenos que rodean al santuario y ahora que la mayor parte de ese trabajo está ya realizado, el Gobierno vasco ha entregado una subvención que se destinará a la redacción de un plan especial que delimitará los usos de toda la zona y permitirá desarrollar todas las posibilidades. Por ahora, las actuaciones se han volcado en la recuperación de las trincheras y los nidos de ametralladoras de la guerra civil, pero esa no es la única posibilidad.
El entorno de Santa Lucía ha despertado el interés de los investigadores. De hecho, en 2006 la Universidad del País Vasco y la revista Avnia presentaron una iniciativa que contaba con la colaboración de José Luis Solaún, miembro del equipo de arqueólogos que trabaja en la rehabilitación de la catedral vieja de Vitoria. Proponían la recreación de una aldea medieval, e incluso, la posibilidad de crear un museo con los restos del yacimiento arqueológico que presumiblemente se encuentra en esta zona. Ya entonces, se propuso la creación de un centro de acogida que podría ubicarse en la casa rural, ahora de propiedad municipal.

Arquitectura y paisaje

La ermita aparece citada en documentos del año 853, aunque su fundación se atribuye, según la tradición oral, a los caballeros templarios, orden militar de la Edad Media. El templo actual es del siglo XV, según recogió Kepa Sojo en su estudio sobre el santuario, en 1995.
La mejora de los edificios se empezó a abordar en 2002 con la redacción de un proyecto para remodelar Santa María, para que mantuviera su aspecto tras su entrada en el catálogo cultural del País Vasco. El recorrido histórico que se puede realizar tomando como punto de partida el santuario lleva al visitante desde la Alta Edad Media hasta la actualidad, pasando por los restos etnográficos de interés entre los que destacan ericeras para almacenar castañas, neveros y caleros.
A esos valores hay que unir los paisajísticos de las rutas que unían Llodio con Bilbao y que todavía se siguen usando hoy por los montañeros que llegan a la romería de Santa Lucía a través del Goikogane.
Félix Muguruza, investigador llodiano también ha destacado en sus estudios los asentamientos de los que aún quedan vestigios en la zona. Prueba de ellos son una estela funeraria y restos cerámicos localizados en las inmediaciones y la posibilidad de que exista una necrópolis.