Els orígens medievals del paisatge català. L’arqueologia del paisatge con a font per a conèixer la història de Catalunya (*)

Jordi BOLÓS. Profesor Titular de la Universidad de Lérida.

La obra, que llega a las 462 pp., es un análisis detenido de las posibilidades que tiene la arqueología del paisaje para el conocimiento histórico de Cataluña.

Editorial: Edición del Institut d’Estudis Catalans
Este libro se inserta en una corriente muy consolidada en los países anglosajones, especialmente en Gran Bretaña, y en otras partes de Europa (Italia y Francia), que aún no está definida en España. La arqueología del paisaje apenas ha prendido en nuestra arqueología, por lo que el trabajo de J. Bolós es no sólo importante, sino necesario, toda vez que su metodología se aplica a un caso histórico, en concreto el de Cataluña.

La obra, que llega a las 462 pp., es un análisis detenido de las posibilidades que tiene la arqueología del paisaje para el conocimiento histórico de Cataluña.

El trabajo permite igualmente una aproximación a esta práctica arqueológica, con una valoración de los principales grupos europeos que se han dedicado al tema, en donde se aprecia que los intentos realizados en España no han llegado a cristalizar en un debate no en una metodología consolidados.

Los diferentes capítulos que se incluyen muestran una aproximación minuciosa a los principales problemas que se plantean en la historiografía catalana (caso, por ejemplo, de las sagreres y vilanoves), con una aproximación siempre a lo que se ha detectado e investigado en el resto de Europa.

La obra presenta abundante material gráfico que permite un reconocimiento claro de las cuestiones planteadas y nos aproximan a la necesidad de organizar la cartografía de manera adecuada. Sin embargo, no aparecen fotografías que permitan saber el estado actual de los paisajes analizados.

Se incluye una abundante bibliografía en cada uno de los capítulos y asimismo aparecen referencias a los debates y a las principales obras generadas en la historiografía europea.

En suma, un libro que marca las posibilidades de la Arqueología Medieval y que obliga a pensar más allá de los asentamientos humanos propiamente dichos, ya que interesan los territorios y los elementos que los han configurado.

(*) Antonio Malpica Cuello. Profesor de Arqueología Medieval. Universidad de Granada

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